
Sobre nosotros

Continuando la antigua tradición bíblica, a la que se atuvieron el mismo Señor y los Apóstoles, la Iglesia, a lo largo de toda su historia ha favorecido el canto en las celebraciones litúrgicas.
La música litúrgica debe responder a sus requisitos específicos: la plena adhesión a los textos que presenta, la consonancia con el tiempo y el momento litúrgico al que está destinada, y la adecuada correspondencia a los gestos que el rito propone.
«La tradición musical de la Iglesia universal constituye un tesoro de valor inestimable, que sobresale entre las demás expresiones artísticas, principalmente porque el canto sagrado, unido a las palabras, constituye una parte necesaria o integral de la liturgia solemne».
Desde Benedictus le ayudamos a solemnizar su celebración, seleccionando la música más apropiada.
Ponemos a su disposición cantantes e instrumentistas, en número y disposición acordes a sus necesidades.


Cada tipo de celebración tiene unas características particulares y requiere de una presencia diferente de la música, buscando ayudar a los fieles a participar de manera más plena.
El instrumento principal es la voz humana, que podrá ir acompañada de instrumentos (viento, cuerda, etc.) para su realce. El órgano de tubos es el instrumento principal en esta tarea. Si la iglesia donde va a llevarse a cabo la celebración no dispone de un instrumento adecuado, disponemos de un sistema de órgano virtual que reproduce el sonido de un auténtico órgano de tubos.
«Téngase en gran estima en la Iglesia latina el órgano de tubos como un instrumento musical tradicional, cuyo sonido puede añadir un esplendor admirable a las ceremonias de la Iglesia, levantando poderosamente las almas hacia Dios y hacia las realidades celestiales»






